Mike Valera
Coach y Consultor Veterinario
Dirigir un centro veterinario no es tarea fácil.
Además de enfrentar los desafíos propios de la profesión, como el cuidado de los animales y la atención a los propietarios, también es necesario gestionar un equipo humano diverso, con sus propias personalidades, expectativas y necesidades.
Si eres propietario de un centro veterinario —grande o pequeño—, es posible que hayas enfrentado problemas comunes como la falta de comunicación, conflictos no resueltos, dificultades de liderazgo, baja productividad, diferencias de valores o una lucha constante con los horarios y la conciliación.
En este artículo, exploraremos cómo el coaching de equipos puede convertirse en una herramienta poderosa para resolver estos problemas y transformar la dinámica de tu clínica veterinaria. Al final, descubrirás que invertir en el desarrollo de tu equipo no solo mejora el ambiente laboral, sino que también impulsa la calidad del servicio que ofreces y, en última instancia, el éxito de tu negocio.
Los retos de gestionar un centro veterinario
Antes de profundizar en los beneficios del coaching de equipos, es importante entender los desafíos específicos que enfrentan los propietarios de centros veterinarios en la gestión de sus equipos. Algunos de los problemas más comunes incluyen:
Problemas de comunicación
La falta de comunicación efectiva es una de las principales fuentes de conflictos en cualquier entorno laboral. En una clínica veterinaria, esto puede traducirse en malentendidos entre los veterinarios, asistentes y recepcionistas, errores en la atención al cliente o incluso fallos en el cuidado de los pacientes.
Dificultades de liderazgo
No todos los veterinarios propietarios tienen formación en liderazgo. Esto puede llevar a un equipo desmotivado, con roles y responsabilidades poco claros, o a una jerarquía confusa donde nadie sabe quién toma las decisiones clave.
Conflictos no resueltos y lucha de egos
Es común que surjan tensiones entre empleados debido a diferencias de personalidad, estilos de trabajo o incluso por competencia interna. Si estos conflictos no se resuelven, pueden deteriorar el ambiente laboral y afectar la productividad del equipo.
Baja productividad
Cuando el equipo no está alineado o motivado, es probable que los indicadores de productividad se vean afectados. Esto puede manifestarse en retrasos en realizar las tareas, errores frecuentes o una falta de compromiso con el trabajo.
Falta de conciliación
Los horarios en los centros veterinarios suelen ser exigentes, lo que dificulta la conciliación entre la vida personal y profesional, a pesar de que todos los sanitarios deben tener una vocación de servicio. Esto puede generar estrés y agotamiento entre los empleados.
Pérdida de la vocación de servicio
En medio de las tensiones diarias, es fácil que el equipo pierda de vista la misión principal: el bienestar de los animales y la satisfacción de los clientes. Esto puede afectar tanto a la calidad del servicio como a la reputación de tu negocio.
Desalineación de valores
Cada miembro del equipo puede tener una visión diferente de lo que significa el éxito, la ética y la atención al cliente. Si no se trabaja en alinear estos valores, pueden surgir tensiones y malentendidos.
¿Coaching de equipos es lo mismo que team building?
Nada que ver una cosa con la otra.
Ojo, que el team building es muy positivo, busca momentos de diversión y construcción de relaciones, pero más enfocado en el corto plazo. Son actividades que bien pueden ser dirigidas por un animador o un monitor de tiempo libre.
Para conseguir un cambio y un desarrollo del equipo, el team building no es suficiente, ya que se necesita un plazo más largo para conseguir resultados duraderos orientados a los objetivos de cada centro. Y debe ser dirigido por coaches certificados que sepan acompañar al equipo a través de un proceso estructurado de autodescubrimiento y mejora continua.
¿Qué es el coaching de equipos y cómo funciona?
El coaching de equipos es una disciplina orientada a mejorar las dinámicas grupales, fortalecer la colaboración y potenciar el rendimiento colectivo.
A través de sesiones guiadas por coaches profesionales, el equipo trabaja en identificar sus fortalezas y debilidades, resolver conflictos, establecer metas compartidas y desarrollar habilidades clave como la comunicación, el liderazgo y la gestión del tiempo.
El proceso de coaching incluye:
- Diagnóstico inicial: evaluar la situación actual del equipo y los principales retos que enfrenta.
- Sesiones grupales: dinámicas y ejercicios diseñados para mejorar la comunicación, la confianza y la colaboración.
- Seguimiento: establecer indicadores de progreso y realizar ajustes según los resultados obtenidos.
En el contexto de un centro veterinario, el coaching de equipos puede adaptarse específicamente a las necesidades de tu clínica y abordar los problemas particulares que afectan a tu equipo.
Beneficios del coaching de equipos para tu centro veterinario
Mejora de la comunicación interna
Uno de los mayores beneficios del coaching de equipos es la mejora de la comunicación. A través de ejercicios prácticos, el equipo aprende a expresar sus ideas de manera clara, a escuchar activamente y a dar retroalimentación constructiva. Esto reduce los malentendidos y fomenta un ambiente de trabajo más colaborativo.
Fortalecimiento del liderazgo
El coaching ayuda a los líderes de la clínica, ya sean los propietarios o los veterinarios con roles de supervisión, a desarrollar habilidades clave como la toma de decisiones, la empatía y la capacidad para motivar al equipo. Un liderazgo fuerte y coherente es fundamental para el éxito de cualquier negocio.
Resolución de conflictos
El coaching proporciona herramientas para gestionar y resolver conflictos de manera constructiva. En lugar de evitar los problemas o dejar que se acumulen, el equipo aprende a abordar las tensiones de forma abierta y respetuosa, lo que mejora el ambiente laboral.
Aumento de la productividad
Cuando el equipo está alineado y motivado, es más eficiente en su trabajo. El coaching ayuda a establecer metas claras, distribuir las responsabilidades de manera equitativa y optimizar los procesos internos, lo que se traduce en un aumento de la productividad.
Mejora de la conciliación
El coaching también aborda la gestión del tiempo y la planificación de horarios, ayudando al equipo a encontrar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal. Esto reduce el estrés y aumenta la satisfacción laboral.
Reencuentro con la vocación de servicio
A través del coaching, el equipo puede reconectarse con la misión y los valores del centro veterinario. Esto no solo mejora la calidad del servicio, sino que también refuerza el sentido de propósito y compromiso de los empleados.
Alineación de valores
El coaching ayuda a identificar los valores individuales y colectivos del equipo, creando una visión compartida que guía todas las decisiones y acciones. Esto fomenta la cohesión y la confianza entre los miembros del equipo.
Casos prácticos: cómo el coaching transformó otros centros veterinarios
Pero dejemos a un lado la teoría y pongamos un par de ejemplos del poder transformador del coaching de equipos.
Imagina un centro veterinario con problemas de comunicación. Los veterinarios se quejaban de que los asistentes no seguían correctamente las instrucciones, mientras que los asistentes sentían que no eran escuchados ni valorados. Tras varias sesiones de coaching, y con las herramientas que acordaron durante las sesiones grupales, el equipo aprendió a comunicarse de manera más efectiva, estableció un protocolo claro para transferir información y comenzó a resolver los problemas antes de que se convirtieran en conflictos mayores.
En otro caso, un centro veterinario enfrentaba tensiones constantes entre los empleados debido a diferencias de personalidad y estilos de trabajo. Después de las valoraciones individuales y entrevistas que los coaches hicieron con los empleados de la clínica, el equipo aprendió a valorar las fortalezas de cada miembro y a trabajar en conjunto hacia un objetivo común. Esto no solo mejoró el ambiente laboral, sino que también se reflejó en un incremento en la satisfacción de los clientes.
Cómo saber si tu centro veterinario necesita coaching de equipos
Mira a ver si te identificas con alguno de los siguientes puntos:
- Hay conflictos frecuentes entre los miembros del equipo.
- La comunicación interna es deficiente.
- Sientes que el equipo no está comprometido ni motivado.
- La productividad ha disminuido.
- Hay quejas recurrentes de los clientes.
- Los empleados parecen desalineados con los valores de la clínica.
- Tú, como propietario, sientes que necesitas apoyo para liderar al equipo.
- Si alguno te ha resonado con fuerza, es probable que el coaching de equipos sea una buena inversión para tu clínica.
¿Por qué invertir en coaching de equipos?
Está claro que todos los servicios profesionales especializados cuestan dinero. Lo que hay que valorar es si se trata de un gasto o de una inversión necesaria.
Y si nos podemos permitir seguir en la situación actual, especialmente si alguno de los puntos anteriores ha hecho clic en alguna parte de tu cabeza. Con el coaching, al mejorar las dinámicas internas, no solo se crea un ambiente de trabajo más saludable y productivo, sino que también se impulsa la calidad del servicio y la fidelización de los clientes.
Además, un equipo motivado y alineado contribuye al crecimiento sostenible de tu clínica veterinaria.
¿Cómo saber si el coaching es para mí?
Nada mejor que probarlo por ti mismo.
De hecho, en el próximo Congreso de Amvac, con mi compañero Antonio Rodríguez Gallego, especializado en coaching de equipos, daremos una píldora práctica, un bocadito de degustación, para que experimentes por ti mismo lo que es una sesión de coaching de equipos. Este taller práctico y gratuito tendrá lugar el viernes 28 a las 12.30h en el Aula Veterinaria en Propet. Para suscribirte a la MikeLetter, solo tienes que rellenar un formulario entrando en mi web www.mikevalera.es.
