Jerónimo Martínez Pino
Acreditado por AVEPA en Anestesia y Analgesia
Responsable del servicio de Anestesia y cuidados críticos del centro de Neurología Veterinaria. Getafe, Madrid.
Presidente del GAVA
Con respecto al comunicado emitido de manera conjunta por el GAVA y el GOVA. ¿Qué os llevó a redactarlo?
Fue la sorpresa ante la visualización de un vídeo que apareció en las redes sociales divulgando una mala praxis (a nuestro juicio) de limpiezas dentales en perros realizadas por auxiliares veterinarios sin anestesia.
¿Cuáles son los principales mitos o desinformaciones que creéis que es necesario desmentir?
Lo que ya se empieza a desmentir sin duda, gracias a la formación en anestesia y a la aparición de especialistas en la materia, son afirmaciones como: “El paciente es demasiado mayor para ser anestesiado” o “La anestesia tiene demasiado riesgo y no se puede anestesiar”. Hoy en día existen especialistas muy formados en la materia y contamos con equipamiento equiparable al de medicina humana con el que se pueden realizar anestesias con cierta seguridad en cualquier paciente, con mayor o menor riesgo según el procedimiento y la situación clínica. Es importantísima la información entregada al tutor o propietario por parte del veterinario responsable con el fin de explicar el procedimiento y así evitar miedos acerca de lo “desconocido” de la anestesia. Es innegable que toda anestesia conlleva un riesgo para el paciente que el tutor debe asumir, pero debe ser realizada por un veterinario especialista o con conocimientos y experiencia suficientes que minimicen ese riesgo, ya que la anestesia sirve para evitar estrés y sufrimiento a nuestros pacientes ante un procedimiento lesivo o incómodo.
¿Habéis notado alguna repercusión tras hacer público el comunicado?
Pues lamentablemente no mucha. Es verdad que en los grupos de nuestra sociedad de anestesia (SEAAV, GAVA) hubo mucho revuelo y se fomentó su divulgación, al igual que en el grupo de compañeros odontólogos (GOVA) que ven en la realización de limpiezas sin anestesia una mala praxis. No obstante, hemos puesto el comunicado y la información en manos de los comités deontológicos correspondientes y estamos a la espera de noticias.En el comunicado mencionáis que un examen oral completo no es posible sin anestesia. ¿Podrías explicar cómo la anestesia mejora la precisión del diagnóstico de enfermedades dentales?La exploración de la cavidad oral de manera exhaustiva usando instrumental para ver fístulas y otros procedimientos más o menos molestos se realizan sin duda mucho mejor bajo una sedación o anestesia ligera, ya que hay que explorar minuciosamente la cavidad oral, realizar radiografías dentales y el paciente no siempre se deja. Además, así evitamos situaciones peligrosas, estresantes y en ocasiones molestas para ellos y para el veterinario odontólogo.
¿Qué impacto tienen estas prácticas de inmovilización física sin anestesia en el bienestar físico y emocional de los animales?
La inmovilización física nunca es una buena práctica a mi juicio, ya que esas situaciones estresantes para nuestros animales conllevan situaciones peligrosas. Emocionalmente puede generar un impacto traumático por la situación de estrés y el dolor que haga que no quieran volver a la clínica ni ver a un veterinario. A nivel físico, esa liberación de catecolaminas por estrés puede tener consecuencias muy negativas, sobre todo en animales geriátricos y cardiópatas con menos capacidad de reserva funcional.
¿Cómo respondéis a los argumentos de quienes afirman que estas limpiezas sin anestesia son «menos invasivas» o «más seguras» para los animales?
Menos invasivas con varias personas sujetando al animal desde luego que no y más seguras tampoco. La seguridad la da el control de la situación, y una situación en la que el animal pueda descontrolarse, moverse o incluso volverse agresivo, no lo veo nada seguro para nadie. Una sedación o anestesia con un protocolo adaptado al paciente y a la situación, administrado y controlado en todo momento por un veterinario especialista, desde luego es una situación mucho más controlada y confortable para el paciente.Además, la limpieza dental con ultrasonidos libera una cantidad de agua para enfriar la punta y, si no se realiza con una intubación endotraqueal con balón de neumotaponamiento, el agua puede pasar a los pulmones generando una neumonía asociada que en muchos casos es letal.
Si pudieras dar un mensaje directo a los tutores de mascotas que consideran estas limpiezas sin anestesia, ¿qué les dirías?
Les recomendaría siempre ponerse en manos de veterinarios especialistas en odontología que nunca les indicarán realizar exploraciones ni limpiezas sin anestesia y lo más probable es que trabajen con personal cualificado en anestesia que podrán resolver dudas e inquietudes al respecto y que les darán confianza ante el cuidado perianestésico de su mascota.
Finalmente, ¿cómo pueden los veterinarios contribuir a concienciar a sus clientes sobre la importancia de la anestesia en los procedimientos dentales?
Con una consulta preanestésica donde el propietario pueda conocer al veterinario que vaya a ser responsable del procedimiento anestésico de su mascota. Así se tranquiliza mucho al tutor y se resuelven muchas dudas e inquietudes que se puedan presentar y además se exponen los posibles riesgos del procedimiento. Hoy en día la consulta de anestesia en cualquier procedimiento en medicina humana es indispensable.
